Málaga, destino Slow Inteligente usará la capacitación, la formación, la tecnología y el trabajo en red para seguir creando oportunidades de empleo en las zonas rurales de la provincia.
El plazo de solicitud para participar en este proyecto, organizado por Cicerones Rurales con la financiación de La Noria Málaga y la Obra Social “La Caixa”, está abierto.
Cicerones Rurales y La Noria, gracias a la Obra Social “La Caixa”, lanzan el proyecto Málaga, Destino Slow Inteligente, que desea generar oportunidades de empleo y, por tanto, de permanencia en el territorio, para los jóvenes de los pueblos de la provincia.
Málaga, Destino Slow Inteligente fomentará un modelo de emprendimiento en la provincia vinculado al turismo slow de experiencias, que promueva y mantenga la autenticidad de las comunidades locales y que ponga en valor el papel de la mujer como transmisora y depositaria de buena parte de la cultura inmaterial de la provincia de Málaga.
El proyecto arranca los días 14 y 15 de noviembre en Vélez-Málaga con la impartición del taller Diseño de productos y experiencias slow: del recurso a la experiencia. Posteriormente, el mismo taller se trasladará a la Serranía de Ronda (Benarrabá) los días 19 y 20 de noviembre con el objetivo de fomentar en ambos territorios proyectos de emprendimiento vinculados al turismo slow.
Las inscripciones para participar en lo talleres están disponibles en el siguiente enlace: https://ciceronesrurales.com/proyectos/malaga-slow/.
Cicerones Rurales trabajará con jóvenes de la Axarquía y la Serranía de Ronda en la puesta en marcha de experiencias turísticas slow a través de la formación y capacitación, el uso de la tecnología y el trabajo en red. La colaboración con los Nodos de La Noria en Axarquía y Serranía de Ronda serán fundamentales para trabajar directamente con los agentes del territorio y así contribuir a paliar el despoblamiento de estas zonas rurales.
La formación y la posterior mentorización de las personas participantes, permitirá la generación de empleo en los pequeños municipios de la provincia, contribuyendo así a la generación de riqueza, el empoderamiento de la población y, en definitiva, la lucha contra el despoblamiento en las zonas rurales de Málaga.
El interior de Málaga tiene mucho que ofrecer a los casi 13 millones de visitantes que el pasado año eligieron la provincia de Málaga como destino turístico: su gente, su patrimonio, sus fiestas, su gastronomía o su sabiduría. Y, sin embargo, el despoblamiento y la fuga de talento es un reto de las zonas rurales de todo el mundo en los últimas décadas.